En «Soñad y os quedaréis cortos», su autobiografía, el P. Pedro Casciaro relata el surgimiento del Opus Dei en México, desde las primeras residencias, hasta los esfuerzos por reconstruir Montefalco. Pero además, narra otros episodios de su vida, como la travesía por los Pirineos al lado de san Josemaría, sus años de sacerdocio en Kenya y la visita del fundador a México en 1970.

Por su parte, Víctor Cano, sacerdote del Opus Dei, en el libro titulado «Don Pedro Casciaro, breve historia de “un pobre cura de ultramar"» recoge de manera amena los episodios más destacados de la vida del padre Pedro −incluida su infancia, cuando soñaba con ser marino, los años junto a san Josemaría y su primer viaje a América− con especial énfasis a los inicios del Opus Dei en México.

San Josemaría, desde finales de la década de los cuarenta, tenía la vista y el corazón puestos en América. En 1949 inició la labor del Opus Dei en México y, pocos meses después, en Estados Unidos. A nuestro país llegó, en el vapor Marqués de Comillas, Pedro Casciaro, uno de los primeros fieles y sacerdotes del Opus Dei, acompañado por una imagen de la Virgen del Rocío y la bendición del fundador.

Los primeros años del Opus Dei en México son inseparables de la vida del don Pedro. Ambos libros por tanto, recogen la aventura de sacar adelante a la Obra en nuestro país y han sido publicados por Minos III Milenio.